«La intención detrás de Decriminalize Nature es la compasión hacia la gente que sufre un gran trauma y han sido abandonados por nuestro sistema de salud mental en EE.UU».
En julio de 2019, Oakland se convirtió en la primera ciudad norteamericana en legalizar el consumo de hongos psicodélicos, ayahuasca, peyote, San Pedro o iboga. La revolucionaria decisión del gobierno local se tomó por unanimidad y fue posible gracias a la pujanza de un entusiasta movimiento ciudadano que se había constituido apenas un año antes: Decriminalize Nature.
Han transcurrido menos de tres años desde aquel momento histórico, y raro es el mes que una nueva ciudad no se suma a la lista de ciudades de EE.UU. que despenalizan la tenencia y consumo (nunca la venta) de ‘plantas maestras’ como las citadas: Denver, Chicago, Oregon, Santa Cruz, Washington D.C… el movimiento para la ‘descrimilización de la naturaleza’ sigue creciendo desde las ciudades con intención de influir en los gobiernos estatales y, finalmente, el Gobierno federal, para lograr revertir finalmente el estigma que pesa sobre muchas de estas plantas enteógenas.
El objetivo y el ‘master plan’ de Decriminalize Nature lo explica con detalle uno de sus fundadores, Daniel Plazola, californiano de origen mexicano, en una interesante entrevista con la Plantaforma para la Defensa de la Ayahuasca:
«La intención detrás de Decriminalize Nature es la compasión hacia la gente que sufre un gran trauma y han sido abandonados por nuestro sistema de salud mental en EE.UU. Como sabrás, en este país tenemos un sistema de salud espantoso para las personas de bajos ingresos. Por desgracia, en lugar de cuidar al segmento más frágil de la población, solemos encarcelarla. Esa ha sido la respuesta del gobierno federal desde los años 80, con Ronald Reagan: un sistema abusivo para con los más pobres. Estas plantas tienen el potencial para sanar el trauma, pero también la capacidad de que puedas cultivarlas fácilmente tú mismo. No necesitamos un laboratorio para ello, de modo que es una solución para las masas que tienen problemas de salud mental», explica Plazola en la entrevista.
Para conseguir la abolición de las leyes prohibicionistas respecto a las plantas maestras, la estrategia de D.N. está clara: local, estatal y nacional (y, eventualmente, internacional): «El motivo por el que es importante trabajar a nivel local es porque cuanto más alto subes en el Gobierno, al menos en Estados Unidos, más tienes que pagar para que te escuchen. Las corporaciones se han hecho con el discurso de tal manera, a nivel estatal y federal, que ahora mismo se trata de un sistema de “pagar y hablar” (‘pay & play’). Al organizarnos a nivel local no tenemos que pagar para hacer oír nuestra voz, porque nuestros representantes locales son miembros de nuestra comunidad, los podemos encontrar en la cola del supermercado, podemos entrar a sus oficinas, tener una cita y tener un diálogo abierto sin tener que sacrificar nuestros valores», en palabras de Plazola.
First we take Manhattan…
Si Oregon fue el primer estado en despenalizar completamente el uso de psicodélicos, California puede seguir sus pasos en el futuro inmediato. Un proyecto de ley impulsado por el senador demócrata Scott Wiener propone la despenalización de todas las drogas psicodélicas, tal y como propone Decriminalize Nature: «Los psicodélicos son una gran promesa para la salud y el bienestar de la población. Necesitamos movernos desde un modelo de criminalización a uno de enfoque de salud», enfatizaba el senador Wiener en un tuit fechado en abril de 2021.
Si California llegara a aprobar la propuesta de ley, las consecuencias se harían sentir en todo el país, e incluso fuera de sus fronteras, como ya sucedió hace unos años con la legalización de la marihuana. No hay que olvidar que California es el estado más poblado de EE.UU. (39 millones de personas, algo más pequeño que España), y su economía tiene un tamaño descomunal: se calcula que si California fuera un país independiente, sería la 5ª mayor economía del mundo, superando a India o el Reino Unido. No hace falta recordar que su influjo cultural en el mundo es parejo, si no mayor.
No obstante, el movimiento ciudadano Decriminalize Nature quiere desmarcarse de la explotación comercial de las ‘plant medicine’ que podría desencadenar su legalización, como de hecho ha sucedido con la propia marihuana. De hecho, uno de los argumentos antiprohibicionistas en torno al que gira el ‘ethos‘ de la organización es que, al contrario de los psicodélicos de síntesis como el LSD o la MDMA, que necesitan un laboratorio para su fabricación, cualquiera puede cultivar en su casa o en su jardín trasero sus hongos, su peyote o incluso variedades locales de ayahuasca. En palabras de Plazola:
«Nuestra gran preocupación como activistas es el deterioro de nuestra relación con el planeta, el hecho de que no estemos actuando con suficiente celeridad para detener el cambio climático, la extinción masiva de especies… y lo que sabemos de estas plantas medicina es que cambian nuestra relación con el entorno y entre nosotros. Hay algo muy poderoso en el hecho de que la madre Naturaleza produzca estas planas que nos permiten reconectar con ella y entre nosotros en un momento crítico (…) Es muy difícil conectar con la selva amazónica cuando vives, por ejemplo, en Oakland. Puedes hacerlo desde un punto de vista conceptual pero es mucho más sencillo conectar con las plantas que crecen alrededor de ti, cuáles son comestibles, cuáles medicinales, cómo combinarlas para conseguir el efecto de la ayahuasca… Este es el camino que debe hacer la Humanidad para reconstruir su relación con la Naturaleza».
Como movimiento descentralizado que es, Decriminalize Nature no tiene control sobre los diferentes ‘capítulos’ que se están abriendo en ciudades del país o del extranjero, y que ya superan el centenar. El único requisito es que las organizaciones locales compartan y mantengan el código ético establecido por el equipo fundador, en Oakland, California.
Para más información: Decriminalize Nature.
Enlaces:
«Las plantas maestras pueden paliar la crisis de salud mental de los olvidados por el sistema en EEUU», Plantaforma, 18 de marzo de 2022.
‘California Senators Approve Bill To Legalize Possession of Psychedelics Like LSD, MDMA And Psylocybin’, Marijuana Moment, 6 de abril de 2021.